El mejor misil del bombardero
Se cumplen 5 años de la victoria vs Quilmes de visitante. Con un gol agónico de Gustavo Bou, La Academia alcanzaba de manera momentánea a River en la cima del torneo. Además Sebastián Saja atajó un penal. El mejor misil del bombardero.
En la 13ra fecha Racing empató con Olimpo 1-1 (gol de Hauche) y quedaba a 8 puntos del líder, River. La ilusión de campeón se evaporaba a falta de 6 fechas. Sin embargo el plantel se juramentó luchar hasta el final.
Precedido de dos victorias ((1-0 a Gimnasia y 1-0 a Banfield) Racing visitaba a Quilmes con la esperanza de ganar y acechar al líder que había dejado puntos en el camino (0-1 vs Estudiantes y 1-1 vs Velez) y se encontraba 3 puntos arriba.
El 15 de noviembre de 2014 así formaron los equipos. Para Quilmes: W. Benítez, Alegre, S. Martinez, Carli (Suarez), Bontempo, S. Romero (M. López), Braña, Zacaría (G. Klusener), N. Cabrera, B. Sarmiento y A. Fernández. Para La Academia: Saja, G. Díaz (83′ Castillón), Lollo, Y. Cabral, Grimi, M. Acuña (47′ Pillud), Aued, Videla, Centurión, D. Milito (71′ Hauche) y Bou.
Racing con la obligación de ganar y el conjunto «cervecero» por ser local protagonizaron un primer tiempo áspero, duro, de pierna fuerte y dientes apretados. La mayor emoción se produjo a los 41 minutos cuándo Brian Sarmiento (ex Racing) corrió por la izquierda con pelota dominada, enganchó ante G. Díaz, tiró un centro para «Chirola» Romero (otro ex Racing) que cayó luego de un empujón de Y. Cabral. El juez cobró penal para el conjunto de Pablo Quattrocchi.
Frente a frente Sebastián Saja y Sebastián Martinez, arquero y ejecutor, héroe y villano o viceversa. El disparo del defensor quilmeño va hacia la izquierda, con potencia, sin dejar dudas pero el «Chino» se arroja al mismo palo y desvía el remate con sus manos. Respira Racing. Termina el primer tiempo con el marcador en cero.
Para el segundo tiempo La Academia salió con todo en busca de los tres puntos. Con fuerza, con enjundia, con fiereza, con hambre de gloria. El partido desembocó en una catarata de emociones. A los 71 ingresó Hauche por D. Milito (se retiró enojado por el cambio y por el partido jugado), a los 74 fue expulsado Y. Cabral por doble amarilla (luego de una falta a Brian Sarmiento), a los 83 entró Castillón por G. Díaz para quemar las naves.
A los 86 minutos la jugada cumbre. Un mal rechazo es captado por Centurión que sufre la falta de Alegre (doble amarilla y expulsión), la vuelta de D. Milito al banco de suplentes (se había retirado al vestuario luego de ser reemplazado) y el tiro libre a 29,10 metros del arco que presagiaba una jugada de peligro para Racing.
Tomó el balón Gustavo Bou, la Pantera, el bombardero de Concordia, el jugador llegado al club de «relleno», que tardó en debutar (recién lo hizo en la cuarta fecha) pero que se había convertido en el goleador letal que el equipo necesitaba. El remate tremendo con el pie derecho se metió en el ángulo de W. Benítez que sólo pudo rozarla,infló la red y los corazones académicos para llegar a la punta del torneo.
Pero toda historia tiene su momento dramático ya que en tiempo de descuento N. Cabrera (otro ex Racing) tiró un centro al área que fue conectado por G. Klusener. La mala salida de Saja no atenuó el desvió de la pelota. Un sudor frío recorrió el alma académica. Con el pitazo final de S. Laverni, Racing alcanzó los 32 puntos e igualaba la línea de River. El cierre de la fecha dejó al conjunto «millonario» un punto arriba (empató 1-1 vs Olimpo) a falta de 3 fechas.
«Es un triunfo que vale mucho. Se hizo muy difícil el primer tiempo, en el segundo tiempo salimos a jugar como lo habíamos planteado y se hizo buen partido«, comentó Gustavo Bou al final del juego.
Periodista
Richard Simón Martínez
Periodista UAJFK. El fútbol se juega con los pies y se siente con el corazón. Guardiolista de la primera hora.