Inexplicable (otra vez)

Racing tenía todo a su favor para cerrar la fecha 9 de la Superliga de manera redonda: Ganaba 1-0, jugaba con un hombre más ante el último del torneo y podía estirar su ventaja en puntos sobre varios de sus perseguidores. Pero inexplicablemente, San Martín se lo dio vuelta 2-1, lo dejó sin invicto y lo hace regresar a Avellaneda con un bolso lleno de dudas de cara al futuro.

Lo que ocurrió hoy fue algo atípico para este equipo, una actuación sorpresiva? Claro que no. Y hubo algunas muestras de este tipo de partidos, incluso en este nuevo semestre. Con Atlético, también en Tucumán, el equipo ganaba cómodo 2-0 y casi lo termina perdiendo. Lo de Boca, ganando también 2-0 en Avellaneda , es aún mas fresco. Pero lo de esta noche creo que superó todo lo anterior, por el contexto en el cual se estaba dando el partido.

En el primer tiempo no hubo demasiado para destacar, pero si un par de chances por equipo, donde pudieron haberse ido al descanso en ventaja. Con un detalle no menor: el equipo local jugó con un hombre menos desde los 17’ por la expulsión de su  arquero Arce por último hombre. Al final, el empate estuvo bien en líneas generales.

En el segundo tiempo pasó de todo. Racing encontró el gol rápidamente a través de Augusto Solari  a los 3 minutos. Y comenzó a manejar la pelota como sabe hacerlo, comenzando a desesperar a su necesitado rival. Así, tuvo dos chances inmejorables para liquidarlo, primero con Cristaldo y luego con Centurión. Ingresó Marcelo Díaz para lograr mas tenencia del balón y por un buen rato lo hizo bien. Estaba todo dado para asegurar un nuevo triunfo académico.

Pero no…volvieron los fantasmas. De una jugada aislada, un fallido cruce de Orban posibilitó que Claudio Bieler igualara las cosas de cabeza a los 27’ y la Ciudadela se convirtiera en un hervidero.

Coudet veía como se le escurría un triunfo como la arena entre sus manos y mandó a la cancha a Bou por Mena. Y los infortunios siguieron pasando. Enorme corrida de Matías García por la izquierda (nadie lo pudo parar/derribar), centro atrás y nuevamente la ley del ex, Bieler para conectar y dar el triunfo a San Martin.

Los últimos minutos estaban cantados: Racing yendo con todo, pelotazos, centros, el chileno Díaz que tuvo una clara pero no pudo ser.

Otra vez sopa, otra vez la misma y reciente historia. Un equipo que no sabe liquidar los partidos cuando tiene todo a su favor. Racing sigue primero, pero si esto no lo mejora de manera urgente, estar en la cima del campeonato se convertirá en una situación meramente pasajera.