Los síntomas de Racing

Un mano a mano desperdiciado y la expulsión, dos imágenes de parte del capitán del equipo que reflejan a la perfección el momento por el cual atraviesa la Academia. Los síntomas de Racing.

Nerviosismo, alteración, enojo, frustración. Lejos parecieron quedar los días felices de Licha en la cancha porque aún no se encuentra con ello desde hace tiempo en la red, y menos aún cuando no pudo festejar una sola vez con el técnico de turno.

En el partido contra Arsenal hubo dos imágenes que expresan lo que pasa con el equipo en la cancha. Pareciera vencido ante la primera adversidad, bloqueado a la hora de encarar el área y enfrentar el arco para convertir. Hay mucha frustración porque se está viendo una foto en Racing totalmente diferente de la que veíamos hace más de un mes ante Nacional, cuando se obtenía la clasificación. No se entiende que pasó, como no se entiende que Licha no pueda convertir ese mano a mano ante Gagliardo.

No hay, y no había, dudas que el 9 de Racing es y será Lisandro López mientras juegue, pero el problema que es nunca logró encontrarse en esa posición cómodo en este esquema o idea de juego. Licha siempre fue un jugador que le gusta salir del área a jugar, pero para luego definir dentro de ella. En estos partidos se lo ve generando el juego y no llegando al área como un delantero nato. Muchas veces él mismo se genera sus situaciones desde los costados. Otro síntoma de que falta juego en el equipo, abastecedores para quitarle responsabilidades.

En el mediocampo hay un problema, se siente la ausencia de Matías Zaracho. Matías Rojas no está al 100%, Miranda no se encuentra cómodo y se quedó sin el Chelo Díaz, su socio futbolístico. Tiago Banega y Carlos Alcaraz recién están haciendo sus primeras armas en primeras y sería injusto caerles. Ahí hay cosas que el técnico deberá resolver en lo inmediato.

La bronca por no poder convertir, la calentura por ver como el equipo no funciona, la furia por ver que las cosas no salen, generan la foto del final. Un Lisandro sacado, que cae en la fricción cuerpo a cuerpo con los rivales y desatiende el juego del equipo. Un Licha que cuando se dirige a los vestuarios expulsado por tercera vez en su carrera en Racing, revolea la cinta de lo inverosímil que resulta este momento luego de ese famoso clásico que se ganó en febrero de este mismo año.

Racing en la cancha hoy es caos y desorden, esta bloqueado y se frustra cada vez que no le salen las cosas, lo refleja el Capitán en cada imagen. Él es el motor de este plantel y sabe que ganar el cruce ante el Fla es la manera de salir de este bache. Licha sabe que hay mucha autocrítica que hacer adentro del plantel por como se esta jugando y que él, más que nadie, quiere volver a sonreír como contra Aldosivi el 6 de octubre del 2019, donde anotó su último gol con la camiseta que ama. Los síntomas de Racing.

Redactor

David 'Toty' Pintos

Amo Avellaneda. Amo la UNDAV. Amo estar haciendo periodismo en la vereda correcta.