Racing salvó la ropa en el final

En su debut por Copa Libertadores, Racing igualó 1-1 con Rentistas en Montevideo. El equipo volvió a jugar mal y lo igualó en el minuto final cuando jugaba con un hombre menos por la expulsión de Sigali. Juan Cáceres, de cabeza, el grito académico. Pizzi, cada vez mas cuestionado.

Era el inicio de otro torneo, de otra ilusión. Pero la Copa Libertadores es quizá el objetivo mayor para este año. Lo que no es nuevo es el juego del equipo, lo poco que ofrece para destacar, para elogiar, para hacer ilusionar a sus hinchas semana tras semana.

El rival era el humilde Rentistas de Uruguay, de flojo presente en su torneo y además, debutante en el máximo certamen continental.

Pizzi mandó lo mejor que tiene hoy a la cancha. El primer tiempo fue parejo, La Academia tomó la responsabilidad del partido pero eso solo se traducía en la tenencia del balón. El local esperaba, y cuando podía, metia algun escoletazo para lastimar. Y así llegó la apertura del marcador a los 42’ del PT a través de Rodríguez, tras un flojo cierre de Nery Dominguez en defensa.

Ofensivamente, lo de Racing había sido poco y nada.

Para el complemento, una costumbre: Pizzi “tira” a la cancha jugadores ofensivos sin darles un sentido al armado de los ataques, una idea, una estrategia. Y eso, se termina develando en pelotazos para adelante a ver si alguno de celeste y blanco la puede encontrar y anotar. De esos cambios, el mas destacable sin hacer demasiado fue Lovera. Escurridizo, picante, al menos, se mostró como una buena carta en ataque.

Las cosas se pusieron feas para Racing cuando a los 37 del complemento se fue expulsado Sigali, por foul como último hombre

Y allí emergió el amor propio del equipo por ir ante la adversidad. Desbordes de Mena, de Fabricio Domínguez. Hasta que llegó el empate. A un minuto del final, un córner de Lovera fue muy bien cabeceado por el pibe Cáceres y le salvó la ropa al equipo. Si, un juvenil.

Lo dicho, del juego no hay nada para destacar y esto ya es repetitivo. Y preocupa. Y exaspera. Ya van 14 partidos y aun no se sabe a qué quiere jugar el equipo de Pizzi. Su futuro sigue siendo una incógnita, a pesar de la ratificación de Blanco, semanas atrás.

La copa ya empezó y ahora, deberá sumar de a tres como local para no quedar relegado en su grupo que tiene a un claro favorito: el San Pablo de Dani Alves y Crespo.

Por lo local, otra parada brava en cuatro días: recibir al puntero Colón para ganarle y volverse a meter en zona de clasificación. Aunque claro, pequeño detalle. La pregunta sigue siendo el “Cómo”.