Fútbol

Racing, si no sufre no vale

En el estreno de una nueva edición de la Copa Argentina, Racing venció a Sportivo Belgrano de Córdoba por 3-1. Lo perdía hasta el tramo final del partido, pero los goles llegaron todos juntos: Martínez, Copetti y Fértoli. Cuando parecía que se venía un nuevo papelón en esta Copa, Pizzi volvió a sacar cabeza en el último suspiro y sigue con vida en el banco de La Academia

Cuando Martín Arguello marcaba el 1-0 para Sportivo Belgrano a los 11 minutos del segundo tiempo, muchos hinchas de Racing imaginaban lo peor: una nueva eliminación bochornosa en Copa Argentina ante un rival de categorías inferiores.

Hasta ese minuto, el partido había sido parejo, pero los de Pizzi habían contado con las chances mas claras para convertir. Pero ese gol fue una bisagra, en el sentido de que el equipo se convirtió en un manojo de nervios. En la desesperación por evitar otro duro golpe en poco tiempo, Pizzi metí mano en el banco: Lovera, Maggi, Piatti, Fértoli fueron ingresando cual bomberos para apagar un incendio.

En esas circunstancias, era demasiado pedir lucidez y claridad para llegar al empate a un equipo sin tanto tiempo de trabajo y con cambios constantes de partido a partido. Pero lo que a nunca renunció el equipo fue a la entrega y fue, con lo que tenía , sin orden pero con mucho ímpetu.

Por el otro lado, a los cordobeses se le fueron gastando las piernas. Su idea de juego se valora mucho y hasta cierto momento le dio resultado.

Y el otro minuto quiebre fue el 85. Centro pasado que bajaron al medio del área y Mauricio Martinez la empujó para el empate. Ese gol pareció desmoronar a Sportivo Belgrano, ya que tan solo un minuto mas tarde, un gran quite de Gutierrez que cedió para Maggi y el juvenil cedió genial para que Enzo Copetti la empujara al gol de la ventaja academica.

Un desahogo tremendo. Se gritó con bronca. Con el último manotazo de ahogado.

Finalmente, ya en tiempo adicionado, quedó tiempo para la joyita de la noche: Héctor Fertoli la tomó cerca del vértice derecho, se sacó tres tipos de encima a pura finta y definió con clase para el 3-1 definitorio.

Y fue así, Racing si no sufre no gana, y mas que nada en esta Copa que siempre le resulta esquiva aún en etapas iniciales.

El rendimiento no fue el ideal pero la victoria tampoco se puede discutir. La Academia tuvo sus meritos -no muchos- para llevarse el triunfo.

Y Pizzi toma mas aire para seguir trabajando. Una eliminación temprana hubiese sido muy difícil de sobrellevar para el santafesino.

En Copa Argentina, Racing sigue de pie.